Trabajadores de la ‘Nueva Historia’ enfrentarían multa millonaria por perros muertos
Redacción | Piedras Negras, Coah.– El Ayuntamiento que encabeza Jacobo Rodríguez enfrenta una nueva crisis de credibilidad tras la difusión de un video en el que se observa a empleados municipales arrojando los cuerpos de perros sacrificados al relleno sanitario, práctica que ha provocado una ola de indignación y una respuesta contundente de las autoridades estatales.
La Secretaría del Medio Ambiente de Coahuila confirmó que se emprenderán acciones legales, administrativas y económicas contra quienes resulten responsables. “Me parece muy bien que esto haya salido a la luz y habrá consecuencias. Lo más importante es que esto ya salió y esto no se puede quedar escondidito”, declaró la titular de la dependencia, Susan Estens de la Garza, dejando claro que el hecho no quedará impune.
El caso ya fue turnado tanto a la Procuraduría de Protección al Ambiente del Estado (PROPAEC) como a la Fiscalía General de Coahuila, donde se investiga la posible comisión de delitos por maltrato animal y manejo indebido de desechos biológicos. Además, asociaciones protectoras de animales interpusieron una denuncia formal, mientras que la PROPAEC promovió otra de oficio.
En el video se evidencia una disposición irregular de los restos de los animales, contraviniendo la normativa que exige su cremación. Tampoco existen registros sobre el método utilizado para sacrificarlos, lo que aumenta las sospechas de crueldad y abuso por parte del personal municipal.
“Digamos que se ha empezado a proceder. Hay una denuncia formal y esperaremos los tiempos para lo que prosiga”, señaló Estens de la Garza. La funcionaria advirtió que las sanciones económicas podrían superar el millón de pesos y no descartó la responsabilidad penal de los funcionarios implicados.
De acuerdo con las leyes ambientales y de protección animal en Coahuila, actos como estos pueden derivar en sanciones severas, no sólo económicas sino también penales, si se acredita dolo o crueldad.
Mientras tanto, el Ayuntamiento de Piedras Negras guarda silencio ante un escándalo que exhibe, una vez más, la falta de sensibilidad y control en las áreas responsables del bienestar animal. La indignación ciudadana crece, y con ella la exigencia de justicia ante un episodio que refleja el abandono institucional de uno de los temas más básicos: el respeto a la vida.
