La conferencia matutina del Ayuntamiento del pasado miércoles dejó al descubierto un grave señalamiento contra el Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento (SIMAS), luego de que se cuestionara públicamente la falta de medidas de protección para el personal sindicalizado que realiza labores en obras de drenaje.
Durante el encuentro, una reportera dirigió la pregunta al gerente general de la dependencia, Lorenzo Menera, y a su equipo de subgerentes, sobre las condiciones de seguridad con las que operan los trabajadores en campo. El ingeniero Andrés Macías, subgerente operativo de drenaje, sorprendió a la audiencia al reconocer que la “única protección” con la que cuentan es un overol, y que, al finalizar las jornadas, se les envía a casa “a bañarse y con gel”.
La respuesta, que se repitió de manera ambigua incluso tras ser cuestionado más de dos veces sobre si consideraba que estas eran medidas suficientes, reveló que desde hace varios años se trabaja bajo estas condiciones, poniendo en riesgo la integridad física de quienes enfrentan diariamente labores de alto riesgo.
Ante estas declaraciones, se prevé que el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) pueda intervenir para revisar la calificación de riesgo de trabajo que actualmente tiene el SIMAS y evaluar si procede un ajuste en la prima de riesgo, una modificación en la clasificación de actividades o incluso sanciones directas. Entre las medidas que el IMSS podría imponer destacan el incremento de las cuotas patronales por riesgos de trabajo, la exigencia inmediata de implementar equipo de protección personal conforme a la Ley Federal del Trabajo y el Reglamento Federal de Seguridad y Salud en el Trabajo, así como la responsabilidad laboral por no garantizar condiciones seguras, lo que podría derivar en sanciones económicas y administrativas para la dependencia.
