
Repunta inflación y alcanza un 4.69%
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) ha presentado datos preocupantes sobre la inflación en México, situándola en un 4.69% anual durante la primera quincena de octubre. Este aumento se refleja en el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), que reportó un incremento del 0.43% respecto a la quincena anterior.
A modo de comparación, en la misma quincena del año pasado, la inflación quincenal era significativamente menor, alcanzando solo un 0.24%. Además, la inflación anual en ese momento se situaba en 4.27%, lo que indica un aumento general en la carestía a lo largo del año.
Desglosando los datos, el índice de precios subyacente, un indicador más ajustado que descarta artículos de alta volatilidad, mostró un crecimiento de 0.23% en términos quincenales y de 3.87% anualmente. Dentro de este índice, las mercancías incrementaron en 0.21%, mientras que los servicios aumentaron 0.25%.
Por otro lado, el índice de precios no subyacente, que incluye productos más volátiles, registró un alza más pronunciada, con 1.08% quincenal y 7.17% anual. Los precios de productos agropecuarios crecieron un 0.70% semanalmente, mientras que los energéticos y tarifas autorizadas por el Gobierno experimentaron un aumento del 1.39%. Este último incremento está relacionado en gran medida con la finalización del subsidio para tarifas eléctricas en 18 ciudades, lo cual ha impactado directamente en el costo de vida.
Adicionalmente, la canasta de consumo mínimo, que comprende 176 productos y servicios esenciales, creció un 0.39% en el periodo quincenal y un 4.34% en la comparativa anual. En 2022, este mismo índice había aumentado solo un 0.23% y 3.86% respectivamente.
Finalmente, es notable que los precios al consumidor cerraron 2023 con una subida del 4.66%, marcando un descenso significativo frente al 7.82% en 2022, que representó el mayor incremento en 22 años. Estos datos ponen de relieve la continua lucha contra la inflación en el país y la necesidad de políticas eficaces para estabilizar el costo de vida de la población.
Este panorama económico sugiere que tanto consumidores como responsables políticos tendrán que estar atentos a las fluctuaciones del mercado y sus efectos en la economía familiar