
Sospechan que estruendos en la frontera podrían deberse al fracking
Los fuertes estruendos que sorprendieron a las poblaciones de Piedras Negras y Eagle Pass durante las tardes y noches del miércoles y jueves de esta semana no fueron ocasionados por aeronaves militares, como inicialmente se había especulado.
Autoridades de la base aérea Laughlin, ubicada en Del Río, Texas, descartaron que sus aviones estuvieran relacionados con estos estallidos. Explicaron que las aeronaves que operan en dicha base, modelo T-6 Texan II, se utilizan para entrenamiento de pilotos y mecánicos, y tienen una velocidad máxima de 316 nudos, lo que equivale a 0.67 Mach, es decir, no alcanzan la velocidad del sonido (Mach 1), estimada en 1,235 km/h.
Inicialmente, bomberos de Eagle Pass habían atribuido los estallidos a posibles vuelos supersónicos de estas aeronaves, sin embargo, la versión fue oficialmente desmentida por las autoridades militares estadounidenses.
Ante esta aclaración, surge una nueva hipótesis que apunta a la actividad industrial en la región: el fracking. En el norte de Coahuila y el sur de Texas existen miles de pozos destinados a la extracción de hidrocarburos mediante fractura hidráulica del subsuelo, un proceso que ha sido asociado en distintas partes del mundo con temblores y estruendos subterráneos.
Aunque esta posibilidad cobra fuerza, difícilmente será reconocida por las compañías petroleras que operan en ambos lados de la frontera, lo que deja a la población en incertidumbre respecto al verdadero origen de estos inquietantes sonidos.



