
Redacción | Nava, Coah.– Un nuevo episodio de negligencia municipal vuelve a colocar al Ayuntamiento de Iván Ochoa Rodríguez en el centro de la crítica, luego de que una mujer atropellada por un camión de Bomberos —mientras auxiliaba en un incendio— permanece hospitalizada con la posibilidad real de perder su pierna, todo ello en medio de omisiones, excusas y falta de apoyo oficial.
La víctima, quien resultó gravemente lesionada por un elemento adscrito al municipio, fue trasladada al IMSS por ser derechohabiente. Sin embargo, la atención médica ha sido tan deficiente que su condición se ha agravado al punto de que los médicos analizan la amputación. La situación se complicó aún más cuando la familia reveló que el propio Ayuntamiento de Nava les pidió que no presentaran denuncia, asegurándoles que el municipio asumiría todos los gastos y la atención necesaria.
Cinco días después, el compromiso nunca llegó. La familia afirma que no han recibido apoyo, orientación ni acompañamiento del Ayuntamiento, mientras la salud de la mujer se deteriora peligrosamente.
Ante el abandono oficial, la denuncia finalmente fue presentada el día de ayer, no solo por las lesiones graves, sino por la evidente omisión de responsabilidad municipal. Aunque el Ayuntamiento asegura contar con seguros para este tipo de accidentes, ahora argumenta que, al no haberse presentado denuncia en su momento, el proceso tardará más en iniciar, dejando nuevamente a la víctima atrapada en un laberinto burocrático que solo profundiza su tragedia.
Esta no es la primera vez que el nombre del Ayuntamiento de Nava aparece vinculado a hechos de esta naturaleza. Durante la administración anterior, una menor perdió la vida en un accidente relacionado con un vehículo municipal que ni siquiera contaba con seguro, un caso que continúa judicializado y que dejó claro el desorden, la falta de control y la indiferencia con la que se manejan los vehículos oficiales.
Hoy, con este nuevo caso, la historia parece repetirse: operadores municipales sin supervisión adecuada, protocolos inexistentes o ignorados y una autoridad que, en lugar de responder con responsabilidad, intenta frenar las denuncias mientras la vida y la integridad de los ciudadanos quedan en segundo plano.
La pregunta es inevitable: ¿cuántos casos más debe enfrentar Nava para que su Ayuntamiento asuma plenamente la responsabilidad que le corresponde? Por ahora, la administración de Iván Ochoa Rdz. suma otro episodio de negligencia, omisión y falta de humanidad, mientras una ciudadana lucha por no perder su pierna y su familia exige justicia.



