
Luego de tres días de esfuerzos ininterrumpidos por parte de los equipos de rescate, el cuerpo de Augusto Gutiérrez, un joven de 18 años que había desaparecido el jueves durante una fuerte tormenta, fue localizado a primera hora de la mañana de este sábado cerca del Puente Internacional Número 2.
La triste noticia fue confirmada por las autoridades locales, quienes han estado coordinando las labores de búsqueda desde el momento en que se reportó su desaparición.
Las operaciones de rescate fueron llevadas a cabo principalmente por los cuerpos de rescate de la patrulla fronteriza, quienes, durante su rastreo, lograron asegurar el cadáver que se encontraba varado a orillas del río. Según informaron, el joven había sido arrastrado por las aguas del canal que se forma al final de la calle Roosevelt, en una zona residencial que él intentaba cruzar para llegar a su hogar.
Fuentes informaron que los operativos de búsqueda iniciaron el mismo día de su desaparición, en respuesta a la alerta emitida por su familia. Más de 60 oficiales, incluyendo elementos de la policía local y especialistas en rescate acuático, se unieron a la búsqueda del muchacho, trabajando incansablemente para encontrarlo. A pesar de las difíciles condiciones climáticas y el nivel elevado del agua, los equipos no cesaron en sus esfuerzos.
El subjefe de bomberos, Rudy Cardona, había anticipado previamente que podría pasar un tiempo considerable antes de que el cuerpo emergiera, sugiriendo que podrían ser necesarias más horas o incluso días para localizarlo. Lamentablemente, lo que temían ocurrió, y tras permanecer más de 24 horas sumergido, el cuerpo de Gutiérrez fue finalmente recuperado.
En una conferencia de prensa ofrecida tras el hallazgo, la jefa de policía, Amy González, expresó su profundo pesar por la situación que enfrenta la familia del joven. Destacó la labor de todos los elementos que participaron en la búsqueda y brindó sus más sinceras condolencias a los seres queridos de Augusto, reafirmando el compromiso de las autoridades con la seguridad y el bienestar de la comunidad.
Este trágico episodio ha conmocionado a la localidad, resaltando la importancia de la precaución en situaciones climáticas adversas y la fortaleza de las comunidades en momentos de crisis.