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Pachuca, campeón de la Liga MX

Estaba decidido, el campeón del Apertura 2022 tuvo nombre desde el pasado jueves, cuando Pachuca castigó sobre manera a los Diablos, ese 5-1 de la ida fue una losa muy pesada para los Diablos, que tiraron de orgullo y mantuvieron la fe, pero al final acabaron por sucumbir 3-1 (8-2 global).

Pachuca vuelve a la palestra del futbol mexicano con un título ganado sin discusión, la gloria que se les negó en el Clausura 2022, la alcanzaron unos meses después. Honor merecido a un proyecto bien estructurado que ha recuperado la esencia de antaño.

Y es que desde el inicio Almada no cedía ningún detalle, pedía máxima tensión a su equipo, si bien Ibáñez se perdió la primera, el estratega de los Tuzos pedía que no se corrieran riesgos, no quería ofrecerle alguna opción a los Diablos para meterse en el juego.

Sánchez probó de media distancia y Volpi repelió a tiro de esquina, los Tuzos empezaron a hacerse dueños de la pelota, con transiciones a toda velocidad y Romario siendo un demonio por la banda izquierda.

Aunque Ambriz le dio ingreso a Navarro para tratar de tener más pelota en el centro del campo, los Diablos apenas y la tomaban, porque Pachuca mordía en cada palmo.

Sin embargo, ese gol que necesita Toluca llegó en una acción que parecía no tener nada. Raúl López se agregó por la banda derecha, controló la bola y sacó un fuerte tiro al que Ustari no supo entrarle. Al 20’, los Diablos mantenían vivo su acto de fe.

Pachuca no se estresó, el margen de maniobra que tenía le permitía eso, siguió a lo suyo, no se permitió caer en un escenario en el que los nervios le entraran en el cuerpo, de hecho, acarició el empate en un par de ocasiones, pero Volpi tapó el tiro de Chávez y después, Marcel evitó que Ibáñez rematara a gol.

Luego el juego se templó, Pachuca controlaba, pero no era ese equipo eléctrico en ataque, como si le bastara con el hecho de que los Diablos no se acercaran a Ustari o bien porque el esfuerzo escarlata se multiplicaba para cerrar espacios, y es que, con poco, los Tuzos se acercaban y metían miedo, y luego es espacio para la polémica.

Un centro de Paulino de la Fuente fue desviado por Jean Meneses con la mano, la acción se revisó en el VAR por César Arturo Ramos, se llamó al árbitro Adonai Escobedo, fue al monitor y deliberó que era penal. Toluca siguió alegando. Ibáñez cobró y Volpi atajó, la fe no se agotaba en el infierno.

Sin embargo, unos instantes después, Víctor Guzmán remató con la zurda una pelota que había sido rechazada por el arquero brasileño. Los Tuzos aplacaban la esperanza escarlata.

Con información de Agencias

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