Fractura en Morena: crece la tensión entre Sheinbaum y Adán Augusto
Por caso Bermúdez Requena
La relación entre la presidenta Claudia Sheinbaum y el senador Adán Augusto López atraviesa su momento más tenso desde que ambos coincidieron en el gabinete del presidente López Obrador. La causa: el escándalo que rodea a Hernán Bermúdez Requena, exsecretario de Seguridad de Tabasco durante la gestión de Adán Augusto, señalado por sus presuntos vínculos con la organización criminal conocida como «La Barredora».
El caso ha detonado una fractura interna en el partido Morena, donde las posturas de ambos personajes se han distanciado de forma evidente. Mientras Sheinbaum ha pedido que el senador rinda su versión sobre los señalamientos, dejando entrever su interés por deslindar cualquier posible encubrimiento, Adán Augusto ha respondido con molestia, calificando el tema como “politiquería” y asegurando que no tiene nada que ocultar.
“Sería bueno que diera su versión”, expresó recientemente Sheinbaum ante medios, en referencia directa a su excompañero de gabinete. La presidenta dejó claro que no se trata de una persecución política, sino de una exigencia de transparencia ante hechos que deben ser investigados por las autoridades competentes.
Por su parte, Adán Augusto reapareció públicamente durante el Consejo Nacional de Morena, donde evitó confrontar de forma directa a la presidenta, pero también dejó en claro que no ampliará sus declaraciones y que ya se puso “a disposición de cualquier autoridad” para aclarar lo necesario.
El silencio inicial del senador y su negativa a abordar el tema con profundidad han sido interpretados como una estrategia defensiva, mientras en el entorno de Sheinbaum crece la presión por no tolerar ninguna sombra de corrupción o complicidad.
Analistas coinciden en que este distanciamiento podría afectar la cohesión interna de Morena en un momento clave, de cara al reposicionamiento del partido rumbo a las elecciones intermedias. El caso Bermúdez Requena no solo ha puesto en entredicho el manejo de la seguridad en Tabasco durante la administración de Adán Augusto, sino que ha dejado al descubierto un choque de visiones dentro de la cúpula morenista: por un lado, la narrativa de la renovación ética; por el otro, la defensa cerrada del grupo político.
Por ahora, la fractura entre Sheinbaum y Adán Augusto sigue abierta y podría profundizarse si la Fiscalía avanza en las investigaciones y surgen más implicaciones del caso. Morena enfrenta así un dilema interno que pondrá a prueba su unidad y su discurso de transformación.
