
EU no está listo para reabrir frontera al ganado mexicano
Redacción | Ciudad de México.- La secretaria de Agricultura de Estados Unidos, Brooke Rollins, aseguró que su país “no está listo” para reabrir la frontera al ganado procedente de México, en medio de la crisis sanitaria generada por la plaga del gusano barrenador.
En entrevista con Reuters, Rollins reconoció los esfuerzos del Gobierno mexicano para contener el brote, pero subrayó que la situación aún no es lo suficientemente segura como para reanudar las importaciones.
“Todavía no estamos en el punto en el que me siento cómoda abriendo los puertos, pero creo que cada día que pasa nos acercamos un poco más. Quiero tener la plena seguridad de que hemos removido todas las piedras, de que entendemos cada matiz, de que estamos utilizando todas las herramientas a nuestra disposición”, puntualizó la funcionaria estadounidense.
Rollins visitó México esta semana, donde sostuvo encuentros con la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo y el titular de Agricultura federal, Julio Berdegué, a fin de revisar los avances de la campaña binacional para erradicar el gusano barrenador del ganado.
A pesar del diálogo, la secretaria del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) evitó dar una fecha tentativa para la reapertura fronteriza y adelantó que continuará las conversaciones con el presidente Donald Trump y otros funcionarios de su país antes de tomar una decisión definitiva.
De acuerdo con Reuters, la Secretaría de Agricultura de México no respondió a la solicitud de comentarios sobre las declaraciones de Rollins.
El cierre parcial de la frontera, vigente desde hace casi un año, ha generado tensiones comerciales entre ambos países. Las importaciones de ganado mexicano son clave para Estados Unidos, con un promedio de más de un millón de cabezas anuales, lo que representa cerca del 60 % de las importaciones de ganado vivo y el 3 % del hato nacional.
El Consejo Nacional Agropecuario (CNA) estima que las pérdidas para el sector mexicano superan los mil 300 millones de dólares, debido a la interrupción del envío de aproximadamente 650 mil cabezas de ganado hacia el mercado estadounidense.
La visita de Rollins, aunque reconocida como un paso importante en la cooperación sanitaria, deja claro que el camino hacia la reapertura total de la frontera sigue siendo incierto mientras continúe la amenaza del gusano barrenador.



