
Grave derrame de aguas negras contamina el río Bravo
Una severa fuga de aguas residuales se ha convertido en un nuevo foco de contaminación ambiental en la ciudad, luego de que miles de litros de drenaje terminaran escurriendo hacia el río Bravo desde un punto localizado detrás de la tienda comercial Super Gutiérrez.
Vecinos del sector, alarmados por los olores pestilentes y el evidente escurrimiento de aguas negras, denunciaron que el problema no es nuevo y que pese a los reportes constantes, el Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento (SIMAS) no ha dado una solución definitiva.
Este nuevo derrame, documentado por ciudadanos como “El Apenitas”, no solo representa un riesgo sanitario directo para quienes viven cerca del cauce, sino que también profundiza la crisis ambiental que enfrenta el río Bravo, ya de por sí afectado por descargas irregulares y falta de control en varias zonas de la frontera.
A pesar de los múltiples señalamientos públicos y de que SIMAS se encuentra actualmente bajo la dirección de Lorenzo Menera, el organismo ha sido rebasado por el número de fugas y fallas operativas que se registran cada semana en distintos puntos de la ciudad. La falta de acciones concretas para contener estos incidentes ha convertido varias colonias en verdaderos focos de infección, generando molestia y preocupación entre la población.
Este nuevo caso se suma a la larga lista de omisiones que han puesto en entredicho la capacidad de respuesta del sistema operador del agua en Piedras Negras, donde cada vez más sectores padecen las consecuencias del deterioro de la infraestructura sanitaria.



