
Redacción | Piedras Negras, Coah.- La inminente candidatura de Mayra Ruby Rangel como abanderada de Morena–PT a la diputación local por el Distrito II ha encendido focos rojos dentro y fuera del partido. Su trayectoria, lejos de proyectar solidez, revive viejos episodios que continúan pesándole políticamente y que hoy alimentan dudas sobre si es, realmente, la carta más competitiva para la coalición.
Rangel, ex priísta, ex nueva aliancista, ex petista y ahora morenista, carga con señalamientos que han resurgido desde su paso por la Sección 5 del SNTE, cuando fungió como secretaria delegacional durante la controvertida gestión de José Luis Ponce Grimaldo, destituido en 2019 por malversación y anomalías financieras.
Si bien no existe acusación formal contra la hoy coordinadora de comités, docentes de aquella época recuerdan permisos irregulares, ausencias laborales prolongadas y la cercanía política que mantuvo con el entonces líder sindical. La base magisterial tampoco olvida la elección del Fondo de Ayuda Mutua, donde Rangel recibió apenas 20 votos de 170, uno de los rechazos más notorios en la historia interna del organismo.
En 2021, ya dentro del PT, Rangel escaló a la planilla municipal tras una serie de tensiones internas con liderazgos que reclamaron presiones, promesas económicas y desplazamiento de perfiles que llevaban años trabajando en el proyecto. Su desempeño como regidora —considerado gris por actores dentro del propio cabildo— terminó en una nueva ruptura, esta vez con Jonathan Maltos, el mismo que la impulsó a ocupar ese espacio.
Posteriormente, su cercanía con Jacobo Rodríguez le abrió las puertas de la Dirección del Bienestar Municipal, puesto que mantiene al mismo tiempo que, según señalamientos de trabajadores educativos, continúa percibiendo dos sueldos como docente en la SEP, pese a presuntas incompatibilidades de horario.
Otro punto que ha comenzado a generar ruido político es el caso de Armando Rangel, padre de la aspirante, quien —de acuerdo con testimonios recogidos entre docentes— ha sido señalado por llevar años otorgando préstamos informales con intereses elevados. Algunos maestros afirman haber recibido presiones telefónicas cuando se han atrasado en pagos, además de que el esquema no está regularizado fiscalmente.
Estos señalamientos no son nuevos, pero reaparecen justo ahora, en el peor momento para la aspirante.
Aunque no existen denuncias públicas ni procesos oficiales, la conversación entre maestros revive cada ciclo electoral, convirtiéndose en un flanco que inevitablemente golpea la narrativa de honestidad que Morena busca proyectar en sus perfiles.
Ricardo Múzquiz: el nombre que toma fuerza entre militantes
Mientras el entorno de Rangel se torna más pesado, dentro de Morena comienza a crecer un consenso silencioso: el primer regidor Ricardo Múzquiz sería un perfil políticamente más estable, con trayectoria menos conflictiva y mayor aceptación entre la militancia de base.
Múzquiz, reconocido por su operación política y su presencia territorial en Piedras Negras, es visto como un aspirante más competitivo para enfrentar la elección y, sobre todo, menos vulnerable a cuestionamientos que puedan ser capitalizados por la oposición.
Fuentes internas señalan que varios grupos dentro del partido ya presionan para que la dirigencia reconsidere la designación, pues advierten que una candidatura frágil podría abrir grietas rumbo a 2026.
La figura de Mayra Ruby Rangel no solo divide opiniones: amenaza con fracturar la unidad interna justo cuando Morena busca consolidar su estructura en la frontera.
Los señalamientos del magisterio, las rupturas previas en el PT, las dudas sobre su desempeño como regidora y el desgaste que arrastra de ciclos anteriores conforman un panorama que el partido difícilmente puede ignorar.
Mientras tanto, el nombre de Ricardo Múzquiz se posiciona como la alternativa más sólida dentro del tablero, y su posible ascenso podría redefinir todo el escenario local.
El reloj avanza y el Distrito II sigue siendo un territorio donde cada error, cada señalamiento y cada tensión interna puede inclinar la balanza.



