La madrugada de este domingo, la imprudencia al volante puso en riesgo a vecinos del sector Acoros, cuando dos vehículos deportivos protagonizaron un accidente que dejó cuantiosos daños materiales y un fuerte susto entre las familias de la zona.
El percance se registró alrededor de las 4:00 a.m. sobre la avenida Juan Pablo II, entre Mar de Cortés y Villa de Herrera. Un Dodge Challenger terminó completamente destrozado y un Dodge Charger con daños severos, luego de que ambos circularan a exceso de velocidad en presuntos arrancones bajo el pavimento mojado.
La colisión fue de tal magnitud que los autos cruzaron el camellón, derribaron una luminaria y embistieron a dos vehículos estacionados: una camioneta Kia Sorento, que resultó con daños de consideración, y un Chevrolet Malibu, golpeado en la parte frontal tras el impacto.
A pesar de lo aparatoso del siniestro, no hubo personas lesionadas, únicamente pérdidas materiales en los automóviles y afectaciones a la infraestructura urbana.
Un vecino relató a las autoridades que instantes antes del choque escuchó cómo los vehículos aceleraban en lo que parecía ser una carrera clandestina, lo que refuerza la hipótesis de que los jóvenes participaban en arrancones.
Elementos de Tránsito y Vialidad aseguraron el área y detuvieron a los conductores, quienes fueron puestos a disposición del Ministerio Público de Asuntos Viales para deslindar responsabilidades.
